Los candidatos a la UE, el caso de Turquía

Es el momento de quitar relevancia al Brexit. ¿Se quisieron ir? Pues bien, les deseamos éxito en su nueva vida europea, en este caso hablo de Europa geográfica.

La Unión Europea sigue y seguirá. De hecho, hoy nos concentraremos en su expansión, hablando de las candidaturas actualmente en negociación: las posibles y también las que, por razones evidentes para un europeísta convencido, no ocurrirán NUNCA, aunque algunos la hayan imaginado. ¡Ojo! Cuando se habla de negociaciones, no significa que el resultado será la membresía.

Turquía: una candidatura compleja pero no reciente
Pocos saben que Turquía sometió su candidatura oficialmente hace más de 30 años. Fue en el año 1987.

Desde entonces la UE le da largas. No le dicen que no, ya que existen muchos argumentos en su favor, pero la UE lleva aplazando su decisión por el número de argumentos en contra. Las negociaciones empezaron a finales del 2005.

Puntos positivos de Turquía
Turquía casi fue un miembro fundador del Consejo de Europa (1949). Las condiciones eran bastante más relajadas que las requeridas para entrar en la UE. Bastaba ser una democracia y tener elecciones libres.

En base a eso, Turquía puede hacer valer ese dato, paralelamente a otros interesantes como su participación en asuntos, como la cultura, fue Capital Europea de la Cultura hace algunos años, el deporte, ¿os suena Galatassaray y Besiktas?, y ¿Erasmus?.

Además, Turquía tiene acuerdos comerciales con la Unión Europea desde 1963, cuando todavía se llamaba CEE. Básicamente, es uno de los requisitos que se le pide a un país, tener a la UE como primer socio comercial, este país ya cumple con dicha condición desde hace décadas.

También es miembro de la OTAN, y su ciudad más grande (Estambul) está en la parte europea del país. Ese último dato es interesante porque me sirve como introducción para hablar de los puntos negativos.

Impedimentos actuales para la validación de Turquía
Aunque la ciudad más grande de Turquía está en la parte europea, el 97% del país, incluida la capital, está en Asia.

Otro problema de peso es su población. Sabemos que la población es una variable significativa en las negociaciones entre los países de la UE, y con sus casi 90 millones de habitantes, tendría un peso preocupante en las decisiones.

Hay que añadir a eso la duda sobre el carácter democrático del país y, contrariamente a lo que exige el artículo 2 del Tratado de la Unión, este país expresa su rechazo a la minoría kurda. Ser kurdo en Turquía es ser menos que turco.

En resumen, para que la candidatura sea válida, los países candidatos tienen cumplir con unos 30 requisitos. De momento, Turquía solo cumple 6 o 7….

No quiero ser pesimista, lo cual algunos verían como optimismo, pero la adhesión de Turquía tiene mala pinta, si además hay que añadir un argumento geopolítico de mucho peso: A Europa no le hace ninguna gracia ser vecino directo de países en guerra, hablamos de Irak y Siria.

Leave a Comment